jueves, 23 de julio de 2009

Y volver...


Volver a trabajar en lo que te gusta, en el trabajo mas agradecido del mundo, y no economicamente hablando por supuesto, pero si a nivel personal. Porque si, porque te lo agradecen con cada risa, con cada abrazo y con cada mirada. Esa mirada de admiración tan solo porque les has ayudado a "repelar" el plato o le has curado la herida que se han hecho en el patio.


Por todas esas cosas, (a pesar de tener menos tiempo para estos mundos) ahora vuelvo a estar llena, a sentirme realizada y sobretodo, feliz, muy feliz. Esos 15 locos bajitos, me han robado el corazon en 15 dias.


Hacer lo que te gusta, y que te paguen por ello, no tiene precio.


Nos veremos amigos...